Hey there Delilah

(Hey, hola Delilah)


Hay cosas que no se explican.
Algunos por qué se responden con un "porque quería saber si sentía algo".
Y siguen siendo cosas incomprensibles.

No necesito que entiendas lo que escribo, no necesito que me entiendas.

Necesito que me des la mano.
Necesito que me abraces.

Que me digas que me queres mucho si es que realmente lo haces.

Necesito que sepas que decirlo es bueno, y más cuando es de sorpresa.
Y más cuando es en serio.

¿Sabías? Que a veces me encierro en el baño y lloro en silencio.
No estoy deprimida. No necesito ayuda.
Simplemente lloro.

En silencio.

A veces me duele algo.
A veces suelo sentirme vacía.

Soy insegura: Soy insegura en el 90% de mi vida.

Porque ellos tenían razón: Necesito que me mires cuando hablo.
Necesito saber que me estas escuchando...

... Porque a lo largo de mi vida no lo hicieron, entonces necesito que vos lo hagas.

Necesito que me digas que me queres, porque hasta que no lo digas no lo voy a saber.
Conmigo no funcionan las indirectas.
Y no me doy cuenta de la intención que tiene un chico conmigo, porque mi inseguridad
no me permite sentir que alguien puede quererme
de esa manera.

No siento que tengo amigos hasta que no me abrazan cuando me saludan.

Soy difícil.

Generalmente me siento excluida de todos los grupos. Absolutamente todos.
Amigos virtuales, amigos del colegio...
Todos entran en la bolsa.

No sé por qué, simplemente lo siento así, así que si vos sos mi amigo, si... en tu grupo me pasa lo mismo.

Menos en uno. Hay un grupo en el que no me siento así.
Es uno sobre Años Nuevos y pizzas y un Monopoly en donde me quedo con todo.

El resto... el resto si.

Una vez me preguntaron si estaba deprimida.
Y dije que no.

Me duele la existencia de arañas, de homofobia, de tristeza, de represión.

Así que cuando una de ellas aparezca, dame la mano. No me toques, no me abraces.
Dame la mano.
Y no me sueltes.

No paro de comer, no paro de ver series.
No paro de enamorarme de parejas o de romances épicos de las mismas.

Y en la vida real creo que también me enamoro.
Pero ahí duele un poco más.
O por lo menos la última vez fue así.

No necesito una mitad para sentirme completa, porque nací entera.
Aunque suelo creer que no es así.
Pero realmente lo es, y debería aprenderlo.

Me gusta la música para deprimirme, para sentirme bien o para bailar y cantar.
Y hacerlo a los gritos.

Esa es mi forma de sentir las cosas. No necesito darme la cabeza contra la pared porque lo he hecho muchas veces sin necesariamente hacerlo. No necesito tirarme al piso porque de alguna manera también lo he hecho sin necesariamente hacerlo.
No estoy deprimida.
No estoy triste.
Soy un ser humano con altos.
Y bajos.
Y medios.

Pero la vida me enseño que siempre hay grises. Que mientras el ser humano respire, la vida nunca lo va a llevar al blanco o al negro. Siempre va a estar en el gris. Habrán grises más claros y grises más oscuros, pero grises al fin.

Así que todo lo que puedo hacer es seguir respirando.


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