Desconfío

¿Sabes a donde está el miedo? Está en las manos y las piernas, porque son ellas quienes se aflojan cada vez que pensas en que hagas lo que hagas con esa persona tus amigos van a mirarte fijamente. Está en tu pasado, en tus dolores. El miedo está en el rechazo. En decir y decidir que vas a ir y lo vas a ver y le vas a dar un beso sin contar con que quizás no llegas a su boca porque te saca de un empujón, ahí está el miedo. Está en la inseguridad, nuestra debilidad. 

El miedo está en lo que esa persona pueda llegar a ser. Está en esos primeros momentos en los que es la persona más especial del mundo. Y de repente ves una serie en donde un chico que ama a su novia la engaña con una rubia perfecta y te preguntas si esa persona no será igual. El miedo está en la desconfianza, en la cantidad de veces que te desilusionaron. Está en la respuesta a la pregunta que te haces todo el tiempo: ¿Será como las demás personas? Porque, si, no tiene maldad dentro pero... la inseguridad te inunda los pensamientos y colapsas.

Creo que una persona que no dio pasos básicos en su adolescencia lo hizo por ese miedo. Lo hizo por esa misma inseguridad, lo digo yo, que no di esos pasos básicos de adolescente. Es por eso, es el miedo, la desconfianza. Hay personas tan buenas en este mundo que siempre te van a dar lo mejor, pero hay personas que te miran y conectan con vos de una forma única, pero después con sus manos saca lo mejor de vos y lo estruja. Entonces te desilusionas, y cuando sos tan (TAN) inseguro no podes dejar de pensar en esas cosas. Me han gustado chicos que han sido tan buenos que no puedo explicarlo, pero eso es lo que pasa con la gente buena... es tan buena que cuando te rechaza no lo hace de la mejor manera, y termina convirtiéndose en todo lo contrario: No quiere hacerte daño, entonces trata de ignorarte sutilmente, se aleja de a poco y en su intento de demostrarte que no quiere estar con vos termina siendo mucho más dañino de lo que vos podías imaginar.

El miedo está en nosotros, en todos. Aquella persona que anda por la vida con cualquiera, muy en el fondo sabe que no está en cosas serias por el miedo a que eso la destruya. Porque hay cosas que te destruyen. Porque aunque no te guste ver sufrir a tus amigas, queres ser la que las consuela, no la que es consolada por un mal de amores. Así lo veo yo. Y si muchas veces me preguntaron por qué no me animaba a dar ese paso, esta es mi respuesta.  

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿por qué siempre escuchas las cosas malas y nunca escuchas las cosas buenas?

manual de instrucciones para rendir un final

todos eligen quedar en el camino