Hechos, consecuencias y hechos otra vez.
Me da miedo lo que es capaz de hacer la gente en la vida. Es decir, no sé si es miedo o si es... algo. No quiero seguir leyendo o escuchando frases al estilo de "voy a estar siempre que lo necesites" porque no, no va a estar siempre que lo necesites. Porque es un humano, y no todos los humanos están cuando más lo necesitas. Y a veces no sabes con quien hablar incluso estando rodeado de gente, y te encerras. A veces tenes la sensación de que sos un estorbo, de que sos el descanso, el o la boludo/a del grupo. Eso es común, es normal. Es normal sentir decepción o desilusión de alguien, de una persona. Es normal porque llega un punto en que no crees más en nadie y empezas a decir todo esto que estoy escribiendo. Es normal sentirte solo, perder un grupo de amigos, porque vos también sos humano. Es normal sentir que es el fin del mundo por ello. Es normal recuperarte y tener nuevos amigos. Es normal sentir que son los mejores amigos que podrías haber tenido jamás. Pero la puta madre, es normal que vuelva a pasar lo mismo que con los anteriores.
Yo ya no creo más en la gente. Aparto a toda aquella que hoy sea amiga mía de esta entrada. Hablo del afuera. De pensar que él no es como los demás y darte cuenta que no lo es cuando está con vos, porque cuando está con su junta vuelve a ser el mismo forro de siempre. Tengo miedo de conocer a alguien porque no quiero volver a sufrir otra vez, no quiero volver a pasar por todo lo que pasé. Se me cayó un plan de el resto de mi adolescencia por una situación normal, algo natural que le puede pasar a cualquiera. Soy una persona que siempre fue buena, para todo. Di muchísimo más de lo que me dieron, muchísimo más. Siempre traté de portarme bien con los demás. Tuve 2 grupos de amigos a la vez. Tuve gente a la que quise y me quiso. He tenido amistades por 14 años, por 8 de mi vida. Prácticamente nací con otras, o prácticamente son (eran) amigos míos. ¿Cómo alguien, sin querer hacerlo, puede ser capaz de deshacer todos esos años de alegrías? Por eso me dan miedo las personas, porque no sabes lo que son capaces de hacer incluso sin querer hacerlo. Incluso sin querer cagarte la vida, te la cagan igual, porque al fin y al cabo, no tienen nada más importante que hacer.
Tengo miedo porque pasaron cosas que me hicieron llegar a esa conclusión. Cada hecho es consecuencia de un hecho anterior. Imagínense cuantos hechos pasaron en mi vida que se convirtieron en consecuencias de ese hecho, y cuantas consecuencias que a la vez eran hechos o pasaban a serlo. Fue un camino bastante largo. Y de repente un día dejé de ser buena. No soy buena como lo era antes. Porque me cansé. Porque se rieron de mi tanto como pudieron, y eso dolió. Mucho. Dolió que me escondieran algo por tanto tiempo y se rieran de cada cosa que yo dijera. Dolió que hayan ayudado a que se ilusione conmigo conociéndome a mi, sabiendo que yo no lo quería de esa forma. Dolió y duele horrores que después me hayan dejado sola por hacer lo que sentía, en vez de hacer lo que ustedes querían. De ustedes aprendí a vivir para mi, a hacer lo que yo realmente quería y no pedirle a otro que haga algo sin su necesidad de hacerlo.
Nunca digo que quiero a alguien cuando lo quiero demasiado por el miedo a que no sienta lo mismo. Las personas son muy, muy impredecibles. La vida es muy impredecible. Los días, las horas, todo es impredecible. La desilusión, a eso le tengo miedo. Tengo miedo de que las personas me desilusionen. El hecho de que quienes creía que nunca lo iban a hacer, lo hayan hecho, es lo que hoy me deja a la deriva. Sin embargo, el otro día le explicaba a mi primita que cuando pasa algo no hay un solo responsable. Si uno se pelea con otro, los dos hicieron algo mal. Así lo tuyo sea un 10% y lo del otro 90%. Ambas partes tienen la culpa de lo que paso. Si me pongo a pensar, la culpa la tengo por no darle bola, por hacer lo que sentía. Entonces, si siento culpa por hacer lo que sentí, imagínense. Me tendría que retirar del mundo.
Estaría para retirarme del mundo en un sentido literal. ¿Se imaginan si fuese tan fácil escapar, como sería todo? Porque solo quiero escaparme del mundo cuando tengo un problema. Igual que la otras 487508347508234754 personas que viven en el.
Quiero conocer a gente, y a la vez tengo miedo. El hecho de que me guste alguien que no hace más que reírse de mi, o que no hacía más que reírse de mi todo el tiempo, me da miedo. Me da miedo por las ilusiones que me hago. No es que le tenga fobia a las personas. Yo creo que al final de todo, le tengo miedo a la desilusión. A pensar que esa persona vino para cambiarme la vida, y que al final solo venga para arruinarmela un poquito más.
Si tienen en plan arruinar la vida de alguien, hagan de cuenta que son un frasco de vidrio y que yo tengo un palo de golf en la mano, porque en serio, eso no es de buena gente.
Una silla sigue siendo una silla, incluso cuando no hay nadie sentado en ella. Por ende, las personas siempre van a ser lo mismo, incluso si queres cambiarlas o si son o no tus amigos. Cada uno tiene distintas esencias y distintos defectos y virtudes, pero hay algo básico en el ser humano que lo tienen todos: hacer la más fácil, mentir, discutir sin argumentos o basarse en una estructura u orden social para argumentarse. Es decir, estoy hablando básicamente de lo que me pasó a mi. Un chico se enamoró de mi y yo quede muy mal por no darle una oportunidad. ¿Que hizo la gente? Se basó en que en la sociedad, el enamorado es el bueno y el que no le da la oportunidad es el malo, entonces, terminé sola.
Es común que la gente se base en "códigos" que tiene la sociedad actual para dejarte sola por hacer algo que sentías. Esos códigos sociales son los que no les dejan ver a los demás que detrás del forro que no le da una oportunidad, o detrás del que se quedó con la ex del mejor amigo, hay una persona con sentimientos, con una vida, una familia, y un par de problemas. Es alguien como todos, pero ese supuesto código es lo que tapa todo eso. Por ende, una puede quedar como la mala y a nadie se la va a cruzar por la cabeza preguntarte cómo estás o qué sentís. Es normal para mi. Me acostumbré a estar sola después de todo eso. Odié esos códigos sociales hasta cansarme de tanto odio, pero más odié que la gente se aprovechara de ellos, los códigos. Lo odié mucho porque me tuve que acostumbrar a que la gente me vea de esa forma. Sigo en pie, por ende no es tan grave. Pero es feo, muy feo. En serio, es horrible.
Si tenes algún amigo que pase por una situación como la que yo pasé o algo parecido, no te rehúses a los códigos sociales para juzgarlo. Juzgalo por lo que haga, juzgalo si lo ilusiona al pedo, pero no lo juzgues en base a lo que la sociedad dice. Y preguntale cómo está, qué siente, qué le pasa o cuántas veces llora por día. Eso es bueno. Va a ser bueno para él saber que puede hacer lo que siente y que tiene un amigo que no va a juzgarlo por ello.
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