Las fichas del tablero

Extraño esos tiempos en los que me juntaba con amigos y uno tocaba la guitarra mientras los demás cantábamos. Duele pensar que todos cambiamos, y que nada va a ser como antes.

Extraño cuando nos juntábamos a la noche a comer pizza y cuando éramos todos amigos, muy al estilo "Friends". Y después nos íbamos a la habitación del dueño de la casa a boludear.

Me acuerdo de la música a todo volumen, o de los partidos de fútbol. Me acuerdo, también, que con una amiga nos poníamos a hacer ejercicio en una máquina vieja y nos cagábamos de risa.

Me acuerdo que nadie quería ser mejor que el otro, porque todos éramos lo mismo.

Ese es un claro ejemplo de que los grupos de amigos son como un tablero con fichas, porque hay una parte en donde todos empiezan el juego, después hay otra donde es el mejor momento ya que estan todos cabeza a cabeza, y por último uno gana... y todo termina. Creería que el que gana es el primero que se va del grupo, o que cambia mejor dicho... después el que sale segundo, el tercero, el cuarto, y así... y llega un punto en que el juego termina... y cada ficha sigue su camino, y algunas se proponen sus metas, y otras no llegan a cumplirlas, y esas cosas de la vida.

Me da miedo pensar en que esta teoría sea aplicable a todos los grupos. Me encantaría que mis amigos y amigas sean eternos, amo a quienes hoy estan conmigo, pero también me da cierta nostalgia pensar en que algunas fichas que fueron muy importantes en mi vida hoy siguen su camino. Me duele eso, a veces caigo en estos pozos, y por suerte tengo quien me levante.

Me encantaría que las amistades que hoy tengo sean por un largo tiempo, porque realmente las valoro muchísimo, me encantaría que esta teoría no sea aplicable en este caso. Pero también me hubiese gustado que ciertas fichas sigan jugando conmigo, y no hubiesen seguido su propio camino...

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